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                                                                                                                               NUESTROS ARQUETIPOS MUSICALES

Nada ha existido desde el principio de la Creación hasta que fue hecho un primer Arquetipo. Al formarse el Sistema Solar, la primera Fuerza de Dios, Voluntad-Creación, aparece la segunda fuerza, Amor-Sabiduría. Este Segundo poder a través de La Fuerza de la Imaginación, concibe la Idea-Arquetipo, del Sistema Solar; entonces la tercera Fuerza, la Actividad, trabajando sobre la Substancia Cósmica, produce movimiento, y la Fuerza Armónica-melódica y rítmica, construye un Arquetipo separado para todo lo que toma forma.

En la cuarta Región del Pensamiento Concreto se encuentran los Arquetipos de todas las formas que se manifiestan aquí en el mundo físico. Allí sin embargo todos los objetos sólidos de la Tierra aparecen como cavidades vacías de las cuales suena continuamente la nota básica. Un Arquetipo es una cavidad hueca, vibrante, cuyo tiempo de Vida es un permanente canto. Su apariencia es algo similar a un molde de yeso aquí en nuestro mundo. Así como se derrama yeso en el molde, y se forma una escultura, así los átomos físicos se ponen en orden con una pauta similar, y forman un cuerpo viviente, ya sea una planta, un animal, un hombre. Cada Arquetipo emite un tono musical armonioso, y es este sonido el que atrae y moldea los átomos físicos, dándole forma.

En la región del bulbo, raquídeo de cada ser humano, colocado en la base de la médula espinal hay una "llama" que pulsa y vibra de la manera más maravillosa.

Está coloreada de diferentes matices de acuerdo a la naturaleza de cada individuo. Este fuego emite un sonido como el zumbido de una abeja, y este sonido es la nota-clave del cuerpo Físico tocado también por el Arquetipo. El tono del Arquetipo cambia a través de la Vida, y a medida que cambia, también el cuerpo Denso sufre ciertos cambios.

Cada acto de todo ser humano, tiene un efecto directo sobre el Arquetipo de su cuerpo. Si el acto está en armonía con las Leyes de la Vida y la Evolución, refuerza el Arquetipo y produce una Vida más larga, en la cual el individuo obtendrá el máximo de experiencia y hará crecer el alma de acuerdo con su "status", en la Vida, y su capacidad para aprender. Entonces menos Renacimientos harán falta para llevarlo a la perfección, que para aquel, que evade las tensiones de la Vida, y se dedica a escapar de sus cargas, o aquel otro que aplica sus esfuerzos destructivamente. En el último modo-de Vida, el Arquetipo es presionado -tensión- y se destruye temprano.

De acuerdo con lo anterior, aquellos cuyos actos, son contrarios a la Ley, acortan sus Vidas, y tienen que buscar nuevas encarnaciones un número mayor de veces que aquellos que viven en armonía con la Ley. Esto se aplica a todos sin excepción, pero tiene mayor significado en la Vida de aquellos, que están trabajando conscientemente con las Leyes de la Evolución, que en las de otros. El conocimiento de estos hechos, debería agregar un ciento por ciento de entusiasmo y gusto por hacer el bien. Aún si hemos tomado conciencia "tarde en la Vida", podemos adquirir mayores "tesoros" en los pocos últimos años en relación de lo que hicimos, en varias vidas anteriores. Sobre todo, nos estamos preparando mejor para los renacimientos venideros.

Hay doce Oleadas de Vida distintas que han estado trabajando con la humanidad, desde el comienzo del Período de Saturno. Sus nombres son: Aries -Xeofines-, Tauro -Terafines-, Géminis -Serafines-, Cáncer -Querubines-, Leo -Señores de la Llama-, Virgo -Señores de la Sabiduría-, Libra -Señores de la Individualidad-, Escorpio -Señores de la Forma-, Sagitario -Señores de la Mente-, Capricornio -Arcángeles-, Acuario -Ángeles; Piscis -Espíritu Virginales de la Humanidad-. Cada una de estas Oleadas de Vida tiene su propia nota-clave: Aries, Re bemol mayor; Tauro, Mi bemol mayo; Géminis, Fa sostenido mayor, Cáncer, La bemol mayor; Si bemol mayor; Virgo, Do natural mayor; Libra, Re mayor; Escorpio, Mi mayor; Sagitario, Fa mayor; Capricornio, Sol mayor; Acuario, La mayor; Piscis, Si mayor.

La nota-clave de una pieza de música, es la tónica o nota fundamental sobre la que se construye la composición musical. El Período completo de la Involución y de la Evolución del hombre se encuentra en la escala musical que es de origen Celestial. Max Heindel comenta que la humanidad pasó a través de tres etapas elementales antes del Período de Saturno, y estas tres etapas están representadas, en el extremo más bajo de teclado del piano por La sostenido y Si. El Período de Saturno comienza con el sonido representado por el Do bajo del piano, y se expande hacia arriba hasta Si, incluyendo su tono y formando 12 notas, 7 de las cuales son blancas, y 5 negras. Siete Hermanos de la Orden Rosacruz salen al Mundo y trabajan entre la humanidad. Cinco no se ven nunca.

Antes que la humanidad perdiera contacto con la Región Espiritual del Pensamiento Concreto, sabía que era una Región de tonos y que estos tonos, empapan y construyen todos los Arquetipos de todas las cosas, que existen en los Mundos inferiores. Sabían que eran instrumentos musicales Vivientes cuyos tonos eran escuchados por ellos mismos, a través de una especie de percepción interna. La Supra-Conciencia del hombre sabe todo esto, aún, la tremenda Fuerza contenida en estos tonos musicales. Habiendo perdido el control de esta Fuerza interna o el Poder de conectarse realmente con ella internamente, el hombre ha tenido que buscar por medio de instrumentos musicales para reproducir y manifestar, los tonos oscuramente sentidos en su memoria medio sumergida.

En vez de expresarse él mismo como un instrumento musical internamente consciente, el hombre ha creado instrumentos musicales los cuales expresan algunas fases de su naturaleza interna.

Los instrumentos de viento, están relacionados con la melodía -y a través de la cabeza se expresan como Voluntad, Poder, Pensamiento, Intelecto-, y las tonadas o cantos que producen, son fácilmente memorizados. Los instrumentos de cuerda, están relacionados con la armonía, emoción, e imaginación, y se expresan a través del corazón produciendo sentimientos, felicidad, alegría, placer, dolor, vehemencia, y pena. Los instrumentos de percusión, están relacionados con el ritmo, movimiento, músculos, acción de miembros superiores e inferiores, y excitación en quienes los escuchan, deseo por la acción, de marchar, bailar, batir palmas, marcar el ritmo con los pies, etc.-

Siendo el hombre un instrumento musical triple, ha perdido temporariamente por su estado actual de conciencia, el contacto con el "conocimiento" de sus Poderes internos. Sin embargo, en el futuro, restablecerá este contacto; cuando sea capaz de escuchar la Nota-Clave de cuerpo Denso con un sentido interno, la cual suena en la parte posterior e inferior de su cabeza. Este tono lo va a sincronizar con la "Lira de Siete Cuerdas" colocada en el cerebro. Solo es cuestión de tiempo y de desarrollo, hasta tanto sea capaz de crear por el Poder musical de la palabra hablada. Posteriormente será capaz de tomar contacto con los tonos musicales usados para construir su Cuerpo Vital, y de Deseos, y con una conciencia objetiva, despierta de su trabajo, se volverá tan consciente de esos vehículos, como ahora lo es de su cuerpo Físico-Denso.

*Es el Espíritu el que ve, oye, huele, gusta, y toca y no los órganos de los sentidos. De hecho, estos completamente inútiles para tales propósitos cuando el Espíritu está ausente del cuerpo. Son únicamente instrumentos por medio de los cuales el Espíritu se conecta con el mundo Físico; sólo el Espíritu posee esas facultades, las cuales usa, también, cuando está funcionando en los planos invisibles, cuando deja al cuerpo dormido, o cuando, como "Iniciado", deja el Vehículo conscientemente y funciona en las Regiones Superiores.

(*Hace referencia a que la inteligencia está en el espíritu )

Si todos los días la conciencia de Vigilia se conecta conscientemente con los sentidos del Espíritu, el hombre se prepara para comenzar el trabajo perteneciente a la Iniciación, conscientemente, porque sus sentidos espirituales, paso a paso, le revelarán todo lo que tuvo lugar desde que comenzó su trabajo de desarrollo, en el Período de Saturno, lo cual se realizará a través del Poder de la "Palabra Hablada" -Sonido musical-. Entonces, el hombre conocerá, como los grandes Ángeles Estelares, dirigidos y ayudados por el Dios del Sistema Solar, crearon todo lo que está en El. Verá como a través del Poder del sonido musical las diversas Oleadas de Vida, fueron "Habladas" en la existencia y han sido llevadas a su actual estado de evolución. No precisa detenerse en esto, pues por sus propios esfuerzos pueden continuar y aprender acerca del desarrollo reservado para las futuras Revoluciones y Períodos.

El Sistema Solar todo, es un enorme Instrumento Musical. En el Período de Saturno, los tonos tocados por El, y sus Auxiliares, están representados por los tonos producidos por la octava más baja de la escala musical. Fueron estos tonos, comenzando por el más bajo, que sucesivamente construyeron los siete Globos, en los cuales toda la Vida se manifestó es su lento desarrollo. Las teclas blancas de todas las octavas musicales, producen los tonos constructivos, positivos; y las negras, producen los tonos asimilativos, negativos; ambos tonos se necesitan para producir resultados; Voluntad, Amor, Actividad-Padre, Madre, Hijo; así es arriba como abajo.

Las Oleadas de Vida que trabajaron con nosotros durante el Período de Saturno fueron Aries, Tauro, y Leo. La nota-clave de Aries es Re bemol mayor. La nota-clave de Tauro, es Mi bemol mayor, y la nota-clave de Leo es Si bemol mayor.
Notemos que las teclas negras en el piano son asimilativas y fue durante la primera Revolución del Período de Saturno que la Jerarquía de Leo, -Señores de la Llama- implantaron en la estructura envolvente del hombre el germen del cuerpo Físico. En ese tiempo el hombre era un Espíritu puro diferenciado, ubicado en la Región del Mundo del Espíritu Divino, que es la Región de la Voluntad pura.

De manera que sus sentidos internos, a su tiempo serán capaces de manifestarse en cualquier momento, en cualquier plano, sin la ayuda de órganos especializados relacionados al plano y se harán cognoscibles en la desesperante conciencia objetiva. Cuando el hombre haya logrado un estado superior de desarrollo, el actual, va a ver, oír, oler, gustar, y tocar, son todo su cuerpo físico.

Posteriormente será capaz de ejercitar los mismos sentidos de la misma manera -Control Voluntario- con relación a su Cuerpo Vital, después con su cuerpo de Deseos, y posteriormente con su cuerpo Mental. Todo este desenvolvimiento es la Manifestación del Poder de Dios. Su "Palabra" pronunciada -El Verbo-, Creador de nuestro Sistema Solar.

El primer sentido interno o espiritual que será conectado con la naciente conciencia objetiva del hombre, será a través del oído -sonido-. El siguiente a través del tacto, el gusto, el olfato y la vista. El método utilizado para conectarse con estos sentidos internos, es la concentración. La concentración es una manifestación unidireccional llevada a cabo por el Espíritu, a través del Poder de Voluntad, por medio del cual el -es Espíritu- es capaz de abstraerse de todas sus condiciones físicas y hacer que su conciencia se compenetre de los Poderes Espirituales internos, estando aún con sus cuatro vehículos interpenetrados, el Físico, Vital, de Deseos y Mental. Es decir en estado de Vigilia.                      
                         
Para construir de forma inteligente y dar impulso mediante la palabra correcta, es necesario tener en cuenta:
Observar el mundo del pensamiento y separar lo falso de lo verdadero (Discernimiento)

Aprender el significado de la ilusión, y en su centro localizar el cordón dorado de la belleza exaltada (Verdad)

Observar el cuerpo emocional, controlar sus acciones ya que su energía, si es desordenada, impide el paso de la luz y la energía solar, inutilizando así todos los planes.

Trabajar sobre el cuerpo mental y aprender sobre su naturaleza dual en este plano.

Concentrarse en el principio pensante y ser el maestro de tu mundo mental.       
                                                        Aprender que el pensador y el pensamiento, así como el medio del pensamiento, son diversos en su naturaleza, perteneciendo a la UNICIDAD, realidad última.

Actuar como el pensador y aprender que no es correcto prostituir tus pensamientos en el deseo de la separación (Ilusión de la dualidad).

La energía del pensamiento es para todo bien y servicio del Plan Divino. Por lo tanto no malgastarla con fines egoístas.

Antes que una forma mental sea construida por pensamientos, visualizar su propósito, asegurar su meta y verificar que su móvil sea el adecuado.

El trabajo de limpiar la atmósfera del pensamiento, impidiendo la entrada al odio, al dolor, al temor, a los celos, envidias, debe preceder al trabajo consciente de construcción. Cuidar el campo bioenergético. De él depende la salud, seguridad y estado de bienestar.

Estar atento a los portales del pensamiento. Guardarse del deseo.                                                            
Porque la vida está principalmente centrada en el plano de la vida concreta, las palabras y el lenguaje indican tu pensamiento. Prestar atención y ser cuidadoso.

Cuida tus palabras. Las palabras vanas producirán su efecto cada una. Si son buenas y amables, nada necesita hacerse. De lo contrario se pagará un alto precio.

Las palabras emitidas con egoísmo, construyen un muro de separación y se requiere de un  tiempo prolongado para la destrucción del mismo y liberar así, el propósito egoísta acumulado.

Las palabras expresadas con crueldad, arruinan a quienes sienten su conjuro, como la habladuría ponzoñosa que va de boca en boca, ya que dicha emocionalidad  es causal de los impulsos del alma, cortando las raíces de vida ocasionando muerte y pesar.

Cuando son pronunciadas a la luz del día, aportará justa retribución. Si son dichas como mentiras, refuerzan ese mundo ilusorio en que vive quien las emitió, deteniendo  su liberación y sintiendo en sí mismo el efecto que provocó.

El pensamiento vano, egoísta, cruel y de odio, expresado en palabras, produce una prisión, envenenando toda fuente de vida, provocando desastres y demora. En consecuencia, sé amable, bondadoso, primeramente contigo mismo, en la medida de tus posibilidades. Guarda silencio y sentirás que tu vida se ilumina.

Habla poco de ti mismo. No te compadezcas de tu suerte. Los pensamientos del ego y de tu destino inferior impiden que la voz interna de tu propia alma suene en tu oído. Habla del alma; siente el plan Divino que hay en tí; olvídate de ti mismo construyendo para el mundo. Así se neutraliza la ley de la forma. Así la ley del amor entrará en tí y en el mundo, para el bien mayor y tu propio regocijo.
                                           

                                                                
Alquimia del Amor

El sistema solar es un poderoso instrumento musical, decía Pitágoras.

           Los 12 signos del zodíaco pueden comparase a los semitonos de la escala cromática, y los planetas visibles constituyen las 7 teclas blancas del teclado cósmico. Cada signo, responde a cierto tono; algunos tonos son armoniosos, otros distorsionarán.
           
           Así como encontramos desarmonía y conflicto entre ciertas notas de un piano, encontramos desarmonía y conflicto entre los distintos signos del zodíaco, los planetas y su efecto sobre el hombre.
            La enfermedad es en realidad una falta de armonía entre el espíritu y la personalidad.
            Un conflicto entre el yo inferior y el yo superior.
            Los que se hallan profundamente arraigados en principios elevados “ALQUIMIA DEL AMOR” como estándar de la verdadera grandeza, auto-confiados en sí mismo en el más alto grado y así ser capaces de enfrentar cualquier condición, puede realmente ayudar al otro de manera amorosa y desinteresada en su comunidad o en donde esté, sin ataduras y actuando según la necesidad inmediata.
            Se trata de dar, no de andar pidiendo dádivas.
            Extraer la quinta escencia anímica de sus experiencias diarias a través de la alquimia espiritual, agudizando el poder de su mente creadora, liberándose de las trampas e ilusiones del mundo material; dejar dogmas, convencionalismos, credos, opiniones preconcebidas, siguiendo su voz interna así tenga que pasar por el fuego… entonces, solo entonces podrá encontrar la verdad. Por ende… cualquier promesa que se haga es así mismo , porque la Libertad es la más preciosa posesión del Alma y debemos hacer valer esta grandiosa herencia Universal.
            Quien es amable y considerado en sus negocios, leal con sus amigos, perdonando a sus enemigos, está presente en el orden cósmico Pitagórico.


Por: María Inés Caparrós




El Miedo, una Emoción Dterminante


        Aún hoy, la emoción predominante en nuestras relaciones vinculares, es “el miedo”, miedo a perder…miedo a no tener…miedo a ganar…miedo a dejar de ser…miedo a estar solo…miedo a no ser aceptado…miedo a no ser querido… miedo a que me quieran y me acepten…miedo y más miedo.
        A primera vista hemos de admitir que este problema y todas sus consecuencias, están relacionados con nuestra vida desde un principio. No olvidemos que el mundo en que vivimos es el efecto de nuestras propias causas, y, una consecuencia de ello es “enfadarse con la realidad”.
        Es por esto que si focalizáramos más nuestra atención en la dinámica de aceptar, en vez de juzgar, el miedo prácticamente desparecería.
        Por ejemplo; si una nueva situación nos disgusta, nos revelamos ante lo sucedido, nuestro enfado es enorme, juzgamos a dicha situación (o persona/s), condenamos tal o cual actitud porque la consideramos injusta e inaceptable, en lugar de aceptar la realidad de lo que ha sucedido, tomando la distancia óptima (desapego) Pero la mente continúa resistiéndose, condenando. Juzgando, en definitiva, negándose a reconocer la realidad de lo que ha pasado. Es decir, la mayor parte de nuestros tormentos crónicos no emergen del presente, sino de la tendencia de nuestra mente pensante a obsesionarse con situaciones desagradables que hemos vivido en el pasado o imaginar que algo terrible nos sucederá en el futuro.
        Es este proceso mental de juzgar a todas horas lo que nos impide participar plenamente del presente, del aquí y ahora, y experimentar de manera espontánea las emociones profundas y el goce que nos ofrece la vida a cada momento.
        Si queremos reducir nuestro sufrimiento y maximizar el disfrute en el momento presente, es importante aceptar la realidad tal cual y como se nos presenta en vez de oponernos a ella porque no coincide con nuestro mapa de creencias, nuestras manifestaciones simbólicas internas o las imposiciones de cómo deberían ser las cosas.
        Al aceptar por completo la realidad del pasado y del momento presente, el sufrimiento emocional se reduce a un mínimo, los miedos dejan de acechar nuestra mente y, al no quedar anclados en pautas de negación, podemos avanzar hacia nuestras metas y mejorar nuestra calidad de vida al no repetir situaciones y conductas que nos han perjudicado en algún momento.
        Entonces… si poseemos funciones mentales que nos capacitan y permiten trascender normas y creencias que nos dictan cómo deberíamos pensar y actuar en la vida, basados en el miedo para controlar e inhibir nuestra conducta, podemos recurrir a nuestra sensibilidad intuitiva y espiritual superior, liberándonos del temor de lo que está bien y lo que está mal, lo correcto e incorrecto. Así lograremos sentir el momento presente con más libertad, sintiendo el disfrute de vivir lo espontáneo que habita en nuestro ser, siguiendo los impulsos del corazón y del alma.
        La conciencia humana y el amor sincero, son fenómenos internos que existen en el momento presente; justo en el aquí y ahora de cada nuevo instante, por lo cual son irrepetibles.
        El miedo es nuestro mayor obstáculo para gozar plenamente de la vida.
        Anula el rendimiento y la brillantez emocional. Anestesia las emociones sinceras que permite que dicho rendimiento sea cada vez mayor y que el corazón esté abierto a todo lo nuevo y disfrutar espontáneamente de lo que se hace.

Por: María Inés Caparrós



La Importancia de los Mitos en los Procesos de Sanación

        Partiendo de la premisa de la existencia individual de lo que se denomina realidad y actualidad, el mito ofrece una posible explicación de lo que no puede ser directamente cognoscible.
        Desde este punto de vista, la sumatoria de las diferentes realidades, componen una actualidad tan vasta como inaprensible, salvo por el alcance de los mitos. Siendo tan importantes, no se puede desestimar la posibilidad de conocer por ello nuestras partes oscuras. O lo que es igual las que están fuera de nuestra conciencia, en la periferia de lo que conscientemente entendemos sobre lo que nos rodea.
        El puente entre lo que podemos y lo que aún no podemos acceder de nosotros mismos, es nuestro “mito” actual.
        La especulación, desde el punto de vista etimológico, es un modo de captación intuitivo, lindante con lo visionario. Aquí, este término es aplicado, con el fin de definir la mirada personal que redescubre lo que se halla oculto en lo cotidiano.
        Este es el lugar del mito: trascender la experiencia con el único fin de explicar los acontecimientos, sistematizándolos y exponiendo hipótesis que puedan explicar de forma accesible a quien trata de esclarecer eso que no comprende, o simplemente transmitiéndolo como un conocimiento irrevocable, en todo de acuerdo con las circunstancias. Este intento de dominar desde el plano de la mente el aparente caos de las experiencias cotidianas, que por serlo no dejan de ser algunas veces incognoscibles, pone de manifiesto una estructura innata en el ser humano: la integración de todo cuanto lo rodea. Es imposible llevar a cabo tal tarea sin tener en cuenta que la actividad, la forma natural del pensamiento, se desarrolla por imágenes, incluido el lenguaje.
        Las imágenes y las palabras perduran más fácilmente en el recuerdo, o son más contundentes, cuando van acompañadas por emociones o sentimientos.
        Aparentemente opuesto es el camino científico-cartesiano actual, que ha ejercido su tiranía durante siglos, tal como lo hizo a su manera el mito desde los comienzos de nuestras civilizaciones.
        No solo heredamos un lenguaje, tradiciones familiares, regionales, nacionales o cultura en el sentido incompleto, comúnmente llamada educación. También heredamos miedos. La parte oscura de toda tradición, de toda herencia, sumados a los propios, hacen un bagaje difícil de reconocer por nuestra conciencia occidental.
        Debemos tener en cuenta que poseemos también una compleja trama mental que llamamos inconsciente, a la que no podemos acceder tan fácilmente, pero que no por eso deja de existir e interactuar en nuestra vida diaria. Este es el reino al que han sido relegados los mitos actualmente. O lo que es lo mismo, ahora accedemos a ellos solo desde nuestra parte menos conocida, desde el destierro desde el inconsciente personal o colectivo.
        La propia necesidad humana de trascender aún a pesar de sí mismo, ha hecho que una y otra vez nos enfrentemos con nuestros propios mitos, con nuestras propias excusas o seudoexplicaciones de nuestra historia.
        En los festivales o ritos consagrados a dioses o planetas, lo que en realidad se hace es escenificar, por medio de elementos propios a cada cultura y la aceptación consciente de la injerencia de energías que representan.
        Así, al no haber oposición entre lo humano y el resto de la Naturaleza, no existe la necesidad de conocer sus necesidades ni sus conflictos o alegrías de forma diferente.
        La existencia no puede ser simplemente contemplada o comprendida, sino que es experimentada emocionalmente, en una relación dinámica y recíproca. Según vemos, el modo de expresión primitivo no concibe un mundo falto de vida, sino repleto de ella. Esta se revela de una forma diferente pero complementaria en cada uno de los reinos creados.

La Vida (conciencia) duerme en la piedra,
Sueña en la planta,
Despierta en el animal,
Y sabe que está despierta en el humano.

        Esto no significa que se impartan características humanas a todo lo observado; si la vida se la vive, he ahí la validez de la experiencia para acceder al conocimiento.
        Las imágenes del mito no son únicamente alegóricas sino que son escogidas del pensamiento abstracto y colectivo. Son un vehículo esencial, para memorizar rápidamente, sin necesidad de complicados razonamientos. Aquí es donde los arquetipos encuentran una de las principales causas de su origen en la historia Humana.
        Al intentar definir el complejo carácter del mito podríamos decir que es una creación metafórica llena de sentimientos propios o comunes a quien lo desarrolla y a su ambiente. O sea, que más allá del contenido manifiesto, está gritando una porción de verdad que no puede ser accesible de otra manera.
        En cada ciclo de vida, cada ser, puede empezar de nuevo la travesía hacia el conocimiento del entorno; o bien servirse de interpretaciones anteriores a él y modificarlas en la medida de su necesidad, de acuerdo con sus propias experiencias. Solamente él puede decidir cuanto se adecuan estas herencias culturales, llámense mitos o educación, a los hechos que tengan que enfrentar cotidianamente; al logro de ese salto audaz desde el límite de lo desconocido para enfrentar lo desconocido y la confianza para cuando llegue el momento, tendremos en nuestro poder lo que necesitamos para confrontar con nuestros dragones (sombras) y descubrir así nuestros tesoros.




La acción y la palabra tienen un efecto y un lugar

        Que lo aparente sea en esencia Real dependerá si lo que estamos considerando tiene significado.
        El significado puede perderse en un simple simulacro, en una representación sentimental incomprendida. Cuando las cosas son usadas correctamente, es decir, están relacionadas en un sentido de continuidad, nos contactamos con lo verdaderamente Real.
        Todo simbolismo es el reflejo de una Verdad. Puede haber sido modificada, adaptada para otros fines, pero lleva consigo una Verdad, la misma, internalizada en cada una de sus partes.
        Al juzgar, buscamos esas Verdades en direcciones equivocadas, interpretando de manera equivocada también.
        Solo al experimentar la acción, trascendemos la palabra y al sentirnos en ella de un modo diferente, penetra en la conciencia como una Verdad de calidad diferente.
        Toda acción, como toda palabra tiene un efecto y un lugar, esta es la base de la Conciencia Fractal, que no es tal conciencia.
        La Conciencia Fractal se mueve entre el increíble complejo de acciones y sucesos en un estado de conciencia interna de su significado.
Por: María Inés Caparrós



Quizás...


        Quizás la función del Ser sea aprender...quizás la función de la mente sea investigar, no el mero cultivo de la memoria o la acumulación de conocimiento sino la capacidad de pensar clara y sensatamente partiendo de hechos y no creencias.
        Quizás... no exista el aprender si el pensamiento se origina en pre-juicios o pre-conceptos ya elaborados.
        Entonces... ¿Qué es aprender? Quizás sea Amar la comprensión y Amar Hacer una cosa por sí misma...
Por: María Inés Caparrós



Eco-Respons-Habilidad

Quien Soy impacta y deja huella por el solo hecho de Ser.
       
        La Eco-Respons-Habilidad puede definirse como: Actitud vital en la que el sujeto asume el pleno control de su existencia de manera activa, lo que implica la toma de iniciativas, decisiones y omisiones en el desarrollo de acciones creativas para generar una existencia presente, haciando prevalecer la libertad de elección sobre las circunstancias de la vida, sin perder de vista que por el solo hacho de existir se ejerce un impacto en el medio del cual se és responsable.
Por: Daniel Altendorff


Conciencia Fractal

        Un Fractal es un objeto cuya estructura básica o un fragmento de ésta se repite a diferentes escalas, este es un comportamiento que existe en nuestro universo y afecta a cuanto existe.
        Este principio matemático/geométrico también se da en nosotros como individuos en los aspectos: psicológicos, emocional, relacional, actitud existencial.
        El desarrollo de la Conciencia Fractal, es poder ser conscientes de que nos comportamos, pensamos, creemos y sentimos fractalmente en relación a un modelo primigenio que nos condiciona el "como ser" impidiéndonos Ser; y del mismo modo somos el modelo del cual partirá la fractalización de nuestra descendencia.
Por: Daniel Altendorff


                       Caminar por el Desierto



        El que busca para sí el "milagro" para curar su enfermedad, sin modificar la conducta que lo llevó a ella, poco y nada podrá lograr...
Es importante comprender cuán necesario es salir de "la ciudad" en que habita, abandonando toda estructura proveniente de su personalidad presente, para encontrar más allá de sí mismo, la fuerza sanadora. Es algo que no puede aprenderse con lecciones dirigidas al intelecto, sino que debe venir de una necesidad interior.
En cambio, el que se dispone a transitar el Desierto, donde mora "El Gran Sanador", ese sí logrará su meta.
Caminar por el Desierto,es transitar esas zonas de nuestra psique que aún no han sido exploradas ni colonizadas; son las zonas donde aún no se ha establecido nuestra vida.
Levantarse y salir de la ciudad movilizados para caminar en el desierto, es nacer en el mundo espiritual y servir allí implica coronar nuestra psique, sabiendo que nuestra alma no se acostará nuevamente.


                                                                                                                                María Inés Caparrós


El Poder de Nuestras Formas Mentales

Muy a menudo las personas son destruidas (en un sentido oculto) por sus propias formas mentales. La creación de pensamientos, mediante la concentración y meditación suele ser peligrosa; esto no debe olvidarse jamás. Existen formas mentales que no poseen suficiente materia de deseos y al no poder descender envenenan al hombre en los niveles mentales siendo éste víctima de lo que ha creado, es "la idea fija" del psiquiatra o la "obsesión" que conduce a la locura.
La multiplicación de estas formas mentales, es tan rápida que su forma se asemeja a una nube densa y espesa, que la luz del alma no puede penetrar y el amor de los seres humanos, las actividades bellas, amorosas y alentadoras de la naturaleza y la vida en los tres mundos no pueden horadarla. El hombre se ahoga entonces, está sofocado por sus propias formas mentales.
Esto llevará a comprender cuando se hace hincapié sobre: "El Recto Sentir, Recto Pensar y Puro Vivir". Solo así puede llevarse adelante el trabajo creador sin peligro alguno y solo así puede descender la forma mental a la objetividad y ser un agente constructivo en el plano de la existencia humana.

            
                                                                                                                                                                           María Inés Caparrós




Palabras tomadas del antiguo manuscrito de los Maestros, cuyo original está guardado en Shamballa:

"En las cuatro esquinas del cuadrado, los cuatro ángeles son vistos. Son de color anaranjado, velados en luz rosada. Dentro de cada forma rodeada de llama azul, se ve la llama amarilla.
Ellos expresan cuatro palabras, una para cada raza humana, pero no el sonido sagrado que trae la séptima. Dos palabras se han desvanecido, cuatro son hoy pronunciadas. Una se pronuncia en reinos muy elevados. Así las siete palabras del hombre resuenan, alrededor del cuadrado, pasando de boca en boca.
Cada día del hombre las palabras toman forma y se tornan diferentes:
"Desde el norte es cantada una palabra que significa...sé puro.
"Desde el sur surge la palabra...yo dedico y...
"Desde el este trae una luz divina vibrando alrededor del cuadrado: Amad a todos.
Desde el oeste la respuesta es devuelta: Yo sirvo"




                    Palabras que Sanan

El sonido, cuya fórmula o palabra de poder es emitida por el alma, inicia así el trabajo. Esta palabra es dual. Es emitida en esa nota a la que el alma responde, su propia nota especial, mezclada con la de su personalidad. Este acorde de dos notas produce los efectos y es más importante que la frase misma, que constituye la palabra de poder.


                    El Poder Mágico del Alma

La energía que desciende del alma es el resultado de:
El constante recogimiento interno.
La concentrada y centralizada comunicación del alma con la mente y el cerebro.
La continua meditación sobre el plan de evolución; por lo tanto, el alma está en profunda meditación durante todo el ciclo de encarnación física.
Esta meditación es de naturaleza rítmica y cíclica como lo es todo en el cosmos. El alma respira y por esto vive su forma.
Cuando la comunicación entre el alma y su instrumento es consciente y sostenida, el hombre se convierte en mago blanco.
El alma domina su forma mediante el sutratma o hilo de vida vitalizando su triple instrumento (mental, emocional y físico) y así establece comunicación con su contraparte física (el cerebro). A través de éste, conscientemente controlado, el hombre es energizado para realizar una actividad inteligente en el plano físico.




                      La Enfermedad como Símbolo

La vida a veces, nos plantea situaciones nuevas, en donde lo anterior, surge formulando respuestas, que brindan sentido y claridad a estados emocionales, aparentemente nuevos, pero que sin lugar a dudas, habitaban en algún lugar de nuestro ser.
No solo es importante la interpretación de la enfermedad, sino, como abordarla y ésto presupone una acción, en cuyo contexto la persona, aprende a reconocer su cuerpo, sus partes constituyentes, como un todo que expresan a viva voz, algo de lo que no se es consciente; que espera se escuchado, reconocido, para que vuelva a sonar en ese todo armónico.
El cuerpo es el escenario de los sucesos anímicos y, es en este escenario donde se centra esta tarea para crecimiento y aprendizaje desde un "darse cuenta".
En el ámbito corporal, cualquiera puede señalar donde está el problema, simplemente presionando el lugar donde duele; pero se trata de tocar la herida y plantearse desde allí la pregunta correcta. La pregunta planteada a esa parte oscura, que no se ve, que por alguna razón se deja guardada allí, oculta, materializándose en cada cuadro patológico; es la que evoca ese..."¿qué pasa conmigo?
A partir de aqui, se puede interactuar generando situaciones nuevas, de cambio, de posible resolución.

"CADA NUEVA SITUACIÓN, GENERA SU PROPIO REMEDIO"

En cada patología el cuerpo comienza a expresar en forma simbólica lo que ha ocurrido o está sucediendo.
A través del comportamiento de dicho lenguaje, volvemos a tener acceso a esas raíces, a ese legado cultural e histórico, en cuya variada forma de expresión, el cuerpo habla y manifiesta todo aquello que el sujeto no es consciente o no puede resolver.
El abordaje del mismo, a través de la dinámica grupal o en forma individual, el esfuerzo personal y las soluciones que cada sujeto encuentra por sí mismo, es una de las posibles herramientas utilizadas para ayudar a elaborar y completar los propios pensamientos e interpretaciones a los ya existentes.
En este trabajo de interpretación hay que tener en cuenta, que en el ámbito de los seres vivos, no se puede afirmar nada con certeza absoluta. Por consiguiente, tampoco pueden darse interpretaciones que sean certeras en cada caso para todos. Como cada sujeto participa del mundo colectivo de imágenes y a la vez posee un mundo de imágenes interior y propio, producto también del reflejo exterior; la interpretación solo será correcta cuando lo sea verdaderamente para el individuo. Las interpretaciones prefijadas, proporcionará el marco de apertura al trabajo por el terapeuta.

Entender la enfermedad como símbolo, abre la posibilidad de actuar sobre las correspondientes operaciones vitales. El aspecto corporal de la enfermedad es esencialmente importante, ya que a través suyo llegamos a entender el significado de los síntomas.
Rehabilitación de la enfermedad no es otra cosa que "volver a habitar" volver a tomar propiedad de la casa del cuerpo cons
cientemente en todas sus partes y órganos; es la gran oportunidad que abre cualquier cuadro patológico.
Cuando entendemos el mensaje de un síntoma, este puede volverse irrelevante y desaparecer: Sin embargo no tiene por qué ser así.
Comprensión y aceptación son siempre estimulantes, pero no obligan a la curación en el sentido físico del término. la enfermedad como toda su simbología, debe entenderse como camino de aprendizaje, de autoconocimiento y expansión de la conciencia a niveles más elevados.

                                                                                                                                  María Inés Caparrós


          Los Tres Aspectos del Hombre

El hombre en su presente estado de evolución, se ha convertido en un ser muy complejo. Él, como Espíritu viviente, posee un cuerpo físico, que debe ser usado como instrumento para la acción; un cuerpo vital que le da vitalidad para hacer posible la acción; un cuerpo de deseos que le impele a la acción y una mente que puede refrenar la acción ó darle propósito.
El hombre es un Espíritu, un ego, que acopia el conocimiento a través de la experiencia. Su ser entero está dispuesto y armonizado para la acción, tarea no fácil, si se tiene en cuenta que está tratando de refrenar sus deseos por medio de una mente aún rudimentaria. Sin embargo es algo que vale la pena, ya que el espíritu adquiere músculo espiritual mediante el esfuerzo por conquistar sus deseos inferiores.
El ego tiene muchas oportunidades para el desarrollo de este músculo espiritual y el objeto de su trabajo es el auto-control. Todo aquél que es capaz de controlarse a sí mismo, no derrocha sus esfuerzos en la ira, en vanas lamentaciones o en la envidia, toda su fuerza almacenada será usada para el bien de la humanidad.
Una vez que el hombre ha obtenido este control, cuando se ha convertido en el capitán de su alma, vive simple y naturalmente dentro de la ley. “EL QUE SE GOBIERNA A SÍ MISMO ESTÁ POR ENCIMA DE LA LEY”. Y no significa esto que no observe las leyes, sino que éstas, son observadas implícitamente. Por tal motivo es importante considerar el trabajo realizado sobre el corazón y la mente, indicando que ambos deben ser desarrollados por igual, puesto que son esenciales para obtener sabiduría y comprensión.
Cuando estudiamos con una actitud devocional, podemos sentir la mano guiadora, y, esta acción sublime proveniente tanto del corazón como de la mente, nos hará llegar con el tiempo, a nuestra meta de iluminación espiritual. No importa cuántos libros leamos, ni cuanto tiempo pasemos estudiando; sin esta consideración del corazón, nuestro conocimiento, por más verdadero que sea, será vacío. Hasta tanto la razón como el sentimiento estén activas, la mente no dejará al corazón extraviarse ya que podrá sondear más profundamente en los misterios del ser, al estar inspirado en un corazón intuitivo.



           
                      El Ciclo Vital

El Mundo Físico fue creado en el actual Cuarto día de la creación y no había existido anteriormente. Ello significa, que todo cuanto ha sido llevado a cabo en este mundo, lo hemos hecho nosotros, los humanos. El Elohim que rige la Tierra nos ha dado la materia prima, ya que sin esa aportación espiritual, hubiera sido imposible la existencia misma. Las jerarquías superiores nos han ayudado con su sugerencias, y sus inspiraciones, pero la mano de obra hemos tenida que ponerla nosotros. Nosotros hemos movilizado la voluntad de construir toda esa civilización, buena o mala, que constituye la base de nuestras experiencias. Cuando ese cuarto día termine, el Mundo Físico desaparecerá y nunca más volverá a existir. Constituye el grado máximo de cristalización de la espiritualidad y no puede subsistir después de finalizado el período involutivo.

Todas las experiencias logradas en el mundo material serán incorporadas a la esfera de Deseos, comprendida la organización social quintaesenciada. El Mundo de Deseos es más viejo que el Mundo Físico, al revés de nuestro Cuerpo de Deseos, que es más joven. Fue creado por primera vez en el segundo día de la Creación y su organización corrió a cargo de los Arcángeles. Fue remodelado en el tercer día de la Creación y su organización corrió a cargo de los Ángeles.


En ese cuarto Día, el Mundo de Deseos, ha sido perfeccionado de nuevo por Ángeles y Arcángeles, de modo que el universo que recibiremos en manos de los Ángeles en el quinto Día, no será ese universo "vacío" que encontramos al ocupar el mundo Físico, sino que será una esfera en la que ya existe una organización. Podemos comparar la situación a la de una empresa que cambia de propietario y en la que el nuevo patrón encuentra todas las instalaciones, maquinarias y servicios que había administrado el antiguo. ese patrón vendrá con nuevas ideas, tendrá otros planes, pero sin duda alguna, la organización de la que dispone le facilitará enormemente las cosas.


¿Qué es lo que vamos a encontrar exactamente en ese Mundo de Deseos en el quinto Día, lo cual ya viviremos anticipadamente ahora, cuando comience la Quinta Ronda del Período de la Tierra? 


Encontraremos en primer lugar, la copia exacta de todo lo que existe en nuestro mundo; es decir, de lo positivo que existe en él. Trabajan actualmente en el Mundo del deseo una categoría de Ángeles que se dedican a sacar una copia exacta de todo cuanto el hombre crea en la Tierra por propia iniciativa. Si esa creación es conforme al orden cósmico ellos lo entroncan con las corrientes vitales procedentes de Arriba para que así se vea reforzada y estabilizada. Si la creación no es conforme a las leyes activas en su mundo, la abandonan a los Luciferes, los cuales establecen igualmente una copia en las Regiones bajo su dominio, es decir, las inferiores. Pero como en ellos rige la Ley de Repulsión, que lo destroza todo, los hombres que han establecido aquél propósito, se ven obligados a luchar constantemente, con esfuerzos titánicos, para renovar día a día la imagen que se quiebra, ya que la misma forma que la creación humana, en las regiones superiores del Mundo de Deseos, encuentra fuerzas estabilizantes que la van perfeccionando, incluso cuando los hombres que la crearon dejan de trabajar en ellas, así también la fuerza destructora de las regiones inferiores de ese Mundo ejerce su acción sobre el físico, destruyendo en él lo que el hombre intenta levantar. De ahí que las empresas perversas exijan, de parte de sus promotores, una constante lucha, una tenaz dedicación, con la consecuente sensación de fatiga, mal humor y pesar característico de una labor que debe ser permanentemente recomenzada.


En el Mundo del Deseo encontramos todo lo positivo que hemos construido aquí, pero además encontraremos la organización creada por los Ángeles. Algunas de sus estructuras ya no nos servirán, ya que ellos actualmente, llevan la memoria de todo cuanto acontece en el Mundo Físico, situando a los encarnantes cada uno en el lugar adecuado. Como ya no habrá una esfera inferior a la nuestra y que los humanos de esta época junto con los actuales animales, vivirán en el mismo mundo, toda esa organización ya no nos servirá. El trabajo de cada oleada de vida no es nunca la repetición exacta del realizado por la oleada anterior en la misma fase.


Pero sí nos será útil todo el trabajo realizado por los Ángeles para recibir las corrientes de vida que vienen de lo alto y que les permiten estar conectados con las jerarquías espirituales. En el Mundo de Deseos todos seremos conscientes de nuestra inmortalidad y reconoceremos a nuestros jefes naturales. Nuestra misión esencial consistirá en crear la forma de la Oleada de vida Vegetal,  como así también nos ocuparemos secundariamente de los que se encuentran en la fase animal y en la humana. Por otra parte proyectaremos nuestras ideas hacia la divinidad para que sean tenidas en cuenta en la planificación de futuros universos.


Cada uno de nosotros puede estar representado por múltiples Artificiales en el Mundo del Deseo, prácticamente por uno en cada una de las siete esferas que componen ese mundo, pero las figuras Artificiales más conocidas son el Tentador y el Custodio. La figura del Tentador ha sido muchas veces confundida con las huestes diabólicas. En los relatos populares, el Diablo es el Tentador, cuya misión consistiría en inducirnos al mal obrar. Es bueno recordar como los Luciferes facilitan la ejecución de nuestros deseos, cuando estos se expresa, pero no son ellos quienes los provocan, sino nosotros mismos. Sin embargo, si hay una Entidad interesada en que practiquemos determinados vicios, esa misma entidad ha sido creada por nosotros a fuerza de desear alguna perversidad. 
Todos los Artificiales necesitan de nosotros para seguir viviendo, puesto que se encuentran en un mundo en que la Fuerza de Repulsión lo destruye todo. Entonces se establece una lucha por la vida de ese fantasma, el cual nos provocará para seguir viviendo. En cuanto le cortamos los suministros energéticos, ese Artificial será destrozado por la misma Fuerza de Repulsión, de modo que no representa una imagen estable, sino, que es un representante transitorio de ciertos aspectos de nuestra personalidad.
Ahora bien, como el Artificial de la perversión se mueve en las esferas de los Luciferianos, es muy fácil confundirlo con uno de ellos y de allí que la misión de tentar se haya atribuido al Diablo, cuando en realidad la tentación es una creación constante de nuestra perversidad.

En el momento de la muerte, nuestro primer representante autorizado con el que tropezamos es el Artificial perverso que habita en las regiones inferiores del Mundo del Deseo. Entonces debemos endosarlo, fundirnos en él, vivir en su piel hasta su total destrucción. En ese momento, nuestro Artificial cobra realidad, se convierte en nuestro auténtico YO, mientras dure nuestra estancia en las regiones inferiores. Podemos decir que el Artificial se convierte en un producto natural, ya que su artificio anterior consistía en que su naturaleza se modificaba según la calidad de nuestras acciones y en que representaba únicamente nuestras tendencias inferiores, no la totalidad anímica. Esta imagen de nuestra personalidad inferior es conocida con el nombre de Guardíán del Umbral. Cuando provocamos el odio, el rencor, la sensualidad en nuestros semejantes, los propósitos en nuestras actuaciones, los efectos de esas causas van a parar a nuestro Artificial, que puede cobrar de esta forma una vida exhuberante, pletórica.

Los Luciferianos son los encargados de conducir las energías desde el centro que las emite hasta el centro Receptor.  Así pues, el infierno no es un lugar donde las energías campean a sus anchas, como si fuera un mar de fuego, sino una esfera en la que todo el calor se encuentra integrada en nuestros Artificiales. Mientras vivimos, es evidente que la influencia de nuestro Artificial perverso sobre nuestra personalidad física será tanto más fuerte en cuanto reciba o no proyecciones de la sociedad en la que convivimos. El hombre con responsabilidades sociales, el político, el escritor por poco que se decante hacia la exaltación de las bajas pasiones, se encontrará con un auténtico monstruo que lo está esperando al cruzar el umbral que va de la vida a la muerte.

Vale la pena insistir sobre lo dicho en estos tres puntos: Los durmientes deben hacer lo posible por no ir en sueños a las bajas regiones del Mundo de Deseos, que es donde se forjan las pesadillas, los sueños de angustia, de muerte, de caída, de persecución. Allí es donde se encuentran los Artificiales que rebajan el nivel vibratorio del cuerpo y obligan al individuo durante tres días a permanecer en su nivel medio de luz. Esta advertencia se dirige sobre todo a familias que han perdido sus seres queridos y que experimentan el natural deseo de "verlas" de nuevo. Como el muriente debe pasar por estas regiones inferiores para matar allí su Artificial malévolo, este encuentro no es de utilidad alguna, ya que se entra en contacto con la parte malévola del fallecido, de la que no puede salir más que lo negativo que éste tenía en vida.. Afortunadamente, la persona viva no guarda recuerdos de esos encuentros, que son muy frecuentes al despertar, pero sí le queda la sensación de tristeza y fustración, ya que a lo negativo del contacto, debe añadirse el ambiente en que éste se produce, en un universo en destrucción y algo de esta materia corrupta queda adherida al individuo que viaja, consciente o inconscientemente, a las zonas bajas.

No todo el mundo tiene vida en la Cuarta Región, pero muchos que no lo piensan se encontrarán en ese inmenso lugar. Cuando hacemos oídos sordos a un llamado o situación, cuando no respondemos, cuando eludimos las responsabilidades, nos lavamos las manos; cuando pasamos de largo ante el herido necesitado que nos hace señas de auxilio, estamos transfiriendo vida a nuestro Artificial de la Cuarta Región y, cuando pasemos por ella tendremos que cargar con "el muerto" en las espaldas y pasarnos allí tiempo y más tiempo, totalmente desconectados de todo, sin tener siquiera el consuelo de saber que la Fuerza de Repulsión destruirá a aquél monstruo de brazos cruzados, ya que allí no reina dicha fuerza. Así nos enseñan las leyes que debemos ser todo menos indiferentes.

                                                                   
Etapas para establecer contacto con los símbolos arquetípicos a través de los sueños



1.- Identificar claramente un problema a investigar.
2.- Ordenarse a sí mismo recordar la solución soñada del problema.
3.- Plasmar el sueño, en el momento de despertar, en un diario de sueños o en un CD.
4.- Repetir mentalmente las imágenes del sueño, antes de despertarnos, y repetirlo una vez despiertos. Conservarlas en la memoria y volver a experimentar el curso del sueño. Concluir los sueños inacabados imaginándoles un final lógico.
5.- Esforzarnos, solos o con otra persona, en investigar posibles
interpretaciones de los símbolos oníricos.

Para algunos, los sueños constituyen un medio importante para adquirir visión interna. Sin embargo, no estará de más recordar que los sueños representan un equivalente involucionario de la visión interna, porque raras veces somos conscientes o lúcidos mientras soñamos. Si nos ocupamos con frecuencia del estudio de los sueños, ello nos servirá para adquirir lucidez mientras soñamos.

 Una prueba de lucidez es la siguiente:

Cuando soñemos, digámosno a nosotros mismos: "Estoy soñando y puedo influir en el desenlace de este sueño". Si se puede realmente estar lúcido e influir en el desarrollo del sueño, éste producirá mayor efecto evolutivo sobre la conciencia.
 Sin embargo, aún es más evolutivo el prepararse para la meditación con conciencia pictórica jupiteriana, a fin de adquirir visión interna.
Antes de estar preparados para meditar, hemos de adquirir la facultad de mantener una imagen claramente en nuestra mente.
Durante la meditación, la mayor parte de los aspirantes, pueden recibir espontáneamente imágenes de meditación.  




Sumario sobre la concentración

La concentración se puede desarrollar e incrementar sistemáticamente mediante el dominio de las cuatro fases descritas en este trabajo:
1.- Canalizar la memoria. Relegar todos los recuerdos y concentrarse sólo sobre el seleccionado para que nos conduzca a clarificar la meditación.
2.- Canalizar las emociones y la mente consciente. Hacerse consciente de la respiración, como medio para serlo de las sensaciones internas. Relegar las sensaciones de tensión y relajarse, haciendo que la energía de Cristo penetre en nuestro cuerpo. Liberar la mente consciente, con el fin de estar alerta sobre las realidades y la conciencia internas.
3.- Canalizar las instrucciones internas. Liberarse de las instrucciones negativas o limitativas. Ordenarse a sí mismo responder a la energía de lo Altísimo y al conocimiento consciente, que está despertando, de las realidades místicas aprendidas por medio de las enseñanzas de la Sabiduría Occidental.
4.- Canalizar las imágenes internas. Analizar los símbolos arquetípicos recibidos durante el sueño. Estudiar los símbolos en la literatura oculta. Elegir o recibir espontáneamente un símbolo visual o imagen para que sirva de base a la visión meditadora. Concentrarse sobre dicha imagen durante varios minutos cada día, gradualmente, para desarrollar el poder mental y la estabilidad.

La concentración se desarrollará más si se dedican varios días a cada etapa.
En cada etapa permaneceremos abiertos y seremos conscientes de toda visión interior, consejos, instrucciones, intuiciones, etc. que surjan de adentro.
Reestructuremos nuestras expectativas y nuestro ejercicio de concentración para incluir en él esas enseñanzas intuitivas.
Tras practicar la concentración durante semanas, meses o años, la llamada del mundo material - a través de los sentidos, recuerdos, emociones y pensamientos - se habrá silenciado y estaremos preparados para la meditación. Puede uno ordenarse a sí mismo intuitivamente el empezar a confeccionar un ejercicio interno que sensibilice y  fortalezca la naturaleza interna.
En algunos casos ese ejercicio interno ha de practicarse durante algunos meses antes de estar en condiciones de pasar a la etapa siguiente.
Entre los frutos de la concentración se incluyen: Una capacidad mental más aguda y más fuerte, mayor riqueza de vida interior, crecimiento de la fe en los mundos internos e incremento del conocimiento básico que prepara al aspirante para recibir el influjo de la sabiduría cósmica que llega mediante la meditación avanzada.

La concentración hace que adquiramos devoción, persistencia, observación y discriminación con intensidad espiritual.



Métodos de Concentración y Meditación basados en

el simbolismo Astrológico

La meditación puede ser un medio para acelerar el desarrollo de la conciencia pictórica jupiteriana. Siguiendo el sendero astrológico expuesto, la meditación corresponde a los signos de Piscis y Acuario.
Como se ha dicho, Aries representa la primera fuerza del plano cósmico actual y Piscis representa la última del plano cósmico inmediatamente superior. Del mismo modo, la visualización de Aries representa el último nivel o nivel básico para contactar el siguiente nivel de conciencia mediante la meditación.
Piscis, un signo jupiteriano, representa en la meditación, la recepción de la conciencia pictórica jupiteriana. La conciencia meditativa pictórica requiere el empleo de todas las habilidades adquiridas mediante la concentración:
1.- Una memoria potente y precisa.
2.- Un cuerpo de deseos libre de tensiones y desligado de deseos naturales; y una mente consciente relajada pero alerta y receptiva.
3.- Fuerza para enviar y recibir con claridad instrucciones internas.
4.- Capacidad de concentración sobre y de visualizar claramente imágenes dinámicas.

En otras palabras, se necesita la capacidad de ver, oír, sentir, comprender y recordar nuestras experiencias sensoriales internas.
Mediante la dinámica interacción entre nuestras percepciones visuales, auditivas y/u otras, pensamientos forma y conciencia de las sensaciones, nos armonizamos más con nuestro Yo espiritual. Si ponemos en práctica las visiones de nuestras experiencias meditativas, viviremos nuestras vidas, día tras día, inconmovibles a las llamadas inferiores de nuestro cuerpo de deseos y cada vez más armonizados con el propósito divino de nuestro Yo Superior. Quizá el mejor modo de estudiar la meditación consista en desarrollar un ejemplo.


Un ejemplo de meditación.

Como ejemplo de meditación pisciana, visualícese un cuerpo humano  inmenso, superpuesto al Tabernáculo del Desierto. Yace boca arriba, con sus pies hacia el Este, a la entrada del Tabernáculo. La Sala Este del Tabernáculo incluye la garganta, hombros, brazos y manos. La cabeza está orientada hacia el Oeste y se halla totalmente en la Sala Oeste del Tabernáculo. El resto del cuerpo está en el patio, pero dentro del recinto que forman las paredes exteriores.
Tras relajarnos y acallar los sentidos mediante la concentración, imaginémonos a nosotros mismos acercándonos al Tabernáculo. Cuando las puertas se abren, somos conscientes de que penetramos en los pies del tabernáculo humano. Los pies, regidos por Piscis, representan la puerta de comunicación del contacto básico con el siguiente nivel de conciencia: La conciencia pictórica jupiteriana. Entramos en el Tabernáculo y nos dirigimos al Altar de los Sacrificios, situado en los órganos reproductores del cuerpo humano.
Los órganos reproductores simbolizan esas pasiones materialistas que impulsan nuestra conciencia hacia abajo y nos retienen atrapados en los lazos de la existencia terrena
cualquier actividad desarrollada con fines egoístas. Si bien la actividad sexual es generalmente nuestro mayor escollo, a veces los que se abstienen, dirigen esta energía hacia otras expresiones negativas que son igualmente perjudiciales. Cuando el celibato es, tanto espiritual como físico, la energía sexual se transmuta en más.

Hay que estar alerta a cualesquiera imágenes simbólicas espontáneas que hallemos en nuestros viajes meditativos. Por ejemplo: Un meditador vio una amenazadora cobra en el altar del órgano reproductor. Tras larga vacilación , llegó a la conclusión de que se trataba de una fuerza suya interior que debió haber superado, y se aproximó al altar. La cobra serpenteó amenazadora en torno suyo cuando él se sentó sobre el altar. Durante varios días el meditador volvió a enfrentarse con esta situación y quedó atascado en ese estadio de meditación. Finalmente, el significado
simbólico de la imagen de la cobra se hizo claro cuando pensó que debía haber aceptado la cobra como una fuerza suya interna. Cuando llegó a tal conclusión, la cobra se fundió con su cuerpo y se hizo una con él: El cuerpo de la serpiente se confundió con su espina dorsal y al cabeza hinchada y los colmillos se convirtieron en el cerebro y las glándulas cerebrales. Ante esta mezcla simbólica, el meditador dedujo intuitivamente que tenía que transmutar su energía sexual en un servicio específico de alivio que implicaba el aprender y enseñar los significados ocultos de la vida.

Cada vez que uno insista en meditar sobre una misma imagen, ganará visión interna acerca de uno o varios aspectos de su carácter que pueden ser desarrollados.
Estas visiones se pueden obtener mediante las imágenes simbólicas, como queda descrito, o mediante intercambios verbales o sensibles. A veces el meditador ve a una persona que , de algún modo, quiere transmitirle determinadas palabras, que son soluciones a problemas o instrucciones que debe seguir . En cualquier caso, durante la meditación, debemos estar abiertos a mensajes provenientes de los tres canales mayores de la vista, el oído y el tacto.

Cuando el meditador averigua la parte de su naturaleza que necesita cambiar, enciende el fuego rojo sobre el altar y quema en él la característica inconveniente.
Para que la transmutación sea completa, el meditador necesita visiones específicas de una aplicación positiva, mediante servicio, de las antiguas expresiones negativas de energía. Entonces el meditador desciende del altar y continúa hacia la pila de bronce,  localizada en el corazón..
El corazón debe imaginarse como situado en el centro del cuerpo, un poco a la derecha de su actual posición. Así, desde su posición central, dirige la sangre vital de nuestras energías, desde los deseos egoístas inferiores hacia los órganos que proporcionan visión sobre los elevados propósitos de la vida.
Cuando uno llega a la pileta/corazón de purificación, examina las doce representaciones simbólicas de los signos del zodiaco alrededor del corazón/sol central. Luego trepa a la pileta y baña en ella toda su naturaleza interna. Se desprende del hollín de los errores  reconocidos, de los que se ha arrepentido y ha quemado localizada en el corazón.

Nos aproximamos ahora a la puerta de la Sala Este del Tabernáculo. Cuando se penetra en ella hay que percibir las manos y la garganta, importantes instrumentos de servicio en la existencia material. La mano de la izquierda entrando corresponde al candelabro de siete brazos y representa el conocimiento adquirido mediante los siete  mensajeros planetarios de nuestro sistema solar. Se puede obtener mucha visión interna en esta etapa, contemplando la naturaleza de cada planeta, por turno, y planteándose uno mismo la pregunta:

"¿Cómo puede esta divina energía encontrar a mi través su mejor expresión en el servicio?".

La mano del lado derecho, mirando al oeste, corresponde al Altar de los Panes de la Proposición y representa las oportunidades de servicio que se nos ofrecen a través de las doce casas del horóscopo. La contemplación de la naturaleza de cada casa proporcionará visión interna al plantearse uno la pregunta: 

"¿Cómo puedo expresar, del mejor modo posible, mi propia energía en este departamento de la vida?".

La garganta corresponde al Altar del Incienso y representa la fragancia que desprendemos como consecuencia del servicio realizado. Si servimos como un canal, cada vez más eficiente, de la energía divina, colaborando para el progreso de la evolución humana, nuestra voz se hará más "fragante" y nuestras palabras más agradables a los otros y a nosotros mismos. Usaremos espontáneamente palabras menos ofensivas, ya que la naturaleza ofensiva habrá sido quemada en el Altar de los Sacrificios. Pronunciaremos palabras más en armonía con la palabra divina, procedente de los oscuros mundos internos representados por la cabeza y la Sala Oeste del Tabernáculo.

Cuando estemos en meditación ante la Sala Oeste, imaginemos en su interior el Arca de la Alianza, que corresponde al cráneo. El Arca contiene tres símbolos que representan el producto de nuestros esfuerzos en las tres salas del Tabernáculo. El cráneo contiene tres órganos o centros de energía espiritual que se despiertan mediante esfuerzos espirituales eficientes.
Imaginemos al corazón del cuerpo/Tabernáculo sirviendo como músculo voluntario en el bombeo de la sangre (energía de deseos) hacia el punto que se encuentra en la raíz de la nariz. Nos armonizaremos con ese punto si vivimos sincronizados con el plan divino. Ese punto corresponde a las Tablas de la Ley en el interior del Arca, símbolo de la vida a tenor de la ley interna.

Luego el corazón purificado bombea la esencia del servicio al Vaso de Oro del Maná, cuyo órgano correspondiente en el cráneo es el cuerpo pituitario. Recuérdese que éste activa los cambio sexuales en la pubertad, enviando señales hormonales a las gónadas. Lógicamente, de esto se sigue que, canalizando la energía a la inversa, desde las gónadas a la pituitaria, podemos estimular el comienzo de un despertar más elevado: El de las fuerzas espirituales.

La glándula pineal corresponde a la Vara de Aarón, que floreció. Cuando la pituitaria estimulada, estimula, a su vez, y despierta a la pineal, la vibración armónica de ambos órganos produce la apertura de los doce nervios craneales y el despertar de la visión espiritual voluntaria, simbolizada por el signo de Acuario.

En suma, el nivel básico de meditación consiste en enfocar todo lo relativo a los sentidos, a la memoria, a las emociones y a las facultades mentales, desarrolladas durante la concentración, para dar lugar a una dinámica interacción de imágenes visuales, instrucciones auditivas, conciencia mental y sensitiva y símbolos recordados, para estimular visiones espontáneas que ayudan al crecimiento espiritual.

Este trabajo sobre la meditación termina con un examen de Acuario, el andrógino portador de agua. Comparando este símbolo con la Vara de Aarón que floreció (los doce nervios craneales abiertos), observaremos que la figura de Acuario es un símbolo adecuado de los resultados de nuestros esfuerzos en el Tabernáculo. El andrógino acuariano posee una fuerza sexual totalmente transmutada. El cuerpo es completamente armónico con la naturaleza espiritual, que no es ni masculina ni femenina. El andrógino sostiene una vasija de la que mana agua y que simboliza la sabiduría cósmica que fluye incesantemente a través de los nervios craneales abiertos.

A pesar que se dice que no pueden darse instrucciones para la meditación, que conduzcan específicamente a tal despertar espiritual, el símbolo de Acuario puede proporcionarnos claves que nos ayuden en tal sentido.
 Acuario y Urano, su regente, dícese que están fuertemente asociados a los éteres. En el cuerpo físico, éstos se hallan asociados a la linfa. En un estado relajado de meditación la linfa fluye libremente entre las sinopsis de las células nerviosas del cuerpo.. La linfa es la parte de la sangre que primero recibe los éteres que penetran en el cuerpo. Como los éteres conservan una imagen de la memoria de la naturaleza o registro akásico, el acceso de la linfa a las sinopsis de las células nerviosas puede ser la avenida de la clarividencia y la visión espiritual consciente.

Repasando algunas sugerencias  se nos dice que debemos acallar la mente y los sentidos, así como las demandas de la personalidad: Mentales, emocionales y físicas; luego, liberar las creaciones del yo consciente, incluyendo la meditación que hemos creado; abandonar todas las imágenes y permitir a la sabiduría y la experiencia cósmicas fluir en nuestras vidas y en nuestro yo consciente
El proceso aquí descrito es un método progresivo para ir orientando nuestra conciencia hacia los mundos superiores internos y que da por resultado el despertar de las fuerzas intuitivas e inspiradoras. Aunque éste es uno solamente de los muchos métodos de concentración y meditación posibles, está basado en el simbolismo astrológico, en las enseñanzas de la Sabiduría Occidental .


Prestaremos importancia especial a la cabeza. No meditaremos sobre los otros centros. Oportunamente llegaremos a una apreciación de su vibración, tono y colores y de sus significancias astrológicas. No trabajaremos sobre los centros de la columna vertebral. Todo trabajo realizado debe hacerse en la cabeza y desde ella. Allí se encuentra el asiento de la voluntad, aspecto del espíritu, actuando a través del alma. Tenemos también la expresión sintética de la personalidad; la comprensión de la relación de los dos centros de la cabeza y su mutua interacción, traerá gradualmente el dominio de la personalidad por el alma. Esto conducirá a la consiguiente y subsiguiente actividad dirigida de los otros cinco centros. El trabajo de estos cinco centros será eventualmente tan automático como en la actualidad es el funcionamiento del corazón y de los pulmones en el cuerpo físico.
                                                                                     
                                                                                                                                María Inés Caparrós


Peligros del Hipnotismo


Dominar a las demás por el poder de la voluntad es un ataque mental, mucho más reprensible que un asalto o ataque en el plano físico de acción. A este asalto mental se le llama "hipnotismo" y está calificado en sus efectos, lo mismo que el asalto en el mundo físico. Un hombre fuerte puede dar una palmadita amistosa para hacer que otro haga su voluntad o puede darle un golpe que lo deje inconsciente. El vendedor hipnotista administra exactamente la fuerza necesaria para hacer que el cliente compre o adquiera algo que no necesita, o que no está al alcance de sus medios, y se ilusiona a si mismo diciéndose que es un negocio legítimo.

Malo y despreciable como es esto, no es, por lo menos, tan malo como los efectos posteriores que produce la práctica de sumir a los "sujetos" en sueño hipnótico. La enormidad de este crimen puede apreciarse únicamente cuando se puede ver el efecto sobre los cuerpos invisibles del sujeto.

Una característica de los cuerpos invisibles del hombre es que operan bajo el impulso de la Voluntad. Todo impulso que viene de Adentro tiene su origen en la voluntad del hombre mismo, mientras que los incentivos para la acción surgen de fuentes Externas, comúnmente llamadas "circunstancias" las que tienen su origen en la Voluntad ajena. La diferencia entre el hombre de carácter fuerte, bueno o malo, y el HOMBRE DEBIL, estriba en que el primero está impulsado POR SU PROPIA VOLUNTAD, actuando desde adentro, lo que le permite hacer sus cosas como él mismo determina sin tener en cuenta las circunstancias.

Por otro lado, el débil, que no tiene voluntad, es el juguete inerme de las circunstancias, dominado por la voluntad de los demás, náufrago en el mar tempestuoso de la vida.

Ninguna persona de voluntad fuerte puede ser dominada por un hipnotizador en tal extensión que llegue a dominarse y los que mantienen una actitud mental positiva no pueden ser dominados. De ahí que a la confiada víctima se le diga primeramente que se ponga en actitud perfectamente negativa y que quiera dormir. Los pases del hipnotizador se dirigen entonces hacia la cabeza, golpeando la cabeza del cuerpo vital y arrancándola de la física, de tal manera que cuelgue como un collar de gruesos rodillos en torno del cuello, como si fuera un cuello arrugado.

De esta manera se corta la conexión entre el Ego y el cuerpo denso como en el sueño y los vehículos superiores se retiran. Pero ahora hay una condición distinta a la del estado de sueño. La cabeza del cuerpo vital no está en su debido lugar, envolviendo y compenetrando la cabeza física de la víctima. Está ahora interpenetrada por el éter del cuerpo vital del hipnotizador y de esta manera éste tiene poder sobre su víctima.

Si sabemos lo que significa "interceptar una línea" tendremos la clave de la relación entre el hipnotizador y su víctima por lo menos en cierto grado. Si un hombre tiene un teléfono privado directo desde su casa a su oficina y alguien hace una conexión entre las dos casas, podrá interceptar los mensajes, enterarse de los asuntos del hombre de negocios, expedir órdenes, etc. El hipnotizador hace algo semejante. Intercepta la línea de comunicación entre el Ego y el cuerpo denso de su víctima interponiendo parte de sí mismo en la línea, y en virtud de ello puede obligar al Ego a salir al mundo invisible y a obtener allí cualquier información que desee, en lo posible; o puede hacer que el cuerpo denso del sujeto haga locuras o ejecute actos criminales, de acuerdo con los deseos del hipnotizador.

Pero no es esto lo peor del hipnotismo. El mayor peligro y más grave para la víctima está en el hecho de que una vez que parte del cuerpo vital del hipnotizador ha sido introducido en el de aquélla, ya no puede arrojarlo completamente al despertar. Una pequeña parte del mismo permanece y forma un núcleo mediante el cual el hipnotizador puede obtener nuevamente ingreso y subyugar a su víctima más fácilmente la segunda vez, y en cada ocasión se agrega algo más a ese núcleo, y así la víctima va quedando gradualmente impotente y desamparada, dirigida por la voluntad de su dominador e independientemente de la distancia, hasta que la muerte del uno o del otro acaba con toda conexión. Este residuo del cuerpo vital del hipnotizador es también el almacén de las órdenes que deben ejecutarse en el futuro, implicando la realización de ciertos actos en determinado día y hora, Cuando llega el momento requerido, ese impulso obra en la misma forma que el resorte de un reloj despertador, y la víctima debe realizar la orden, aunque sea el asesinato, sin saber que está influenciada por otro. Al morir el hipnotizador, todas sus víctimas se libertan y ninguna sugestión subsiguiente podrá ya influenciarlas.

Se arguye algunas veces que el hipnotizador emplea su fuerza benéficamente para curar al bebedor y otros vicios, y se admite fácilmente que desde ese simple punto de vista material así debe ser. Pero desde el punto de vista de la "ciencias oculta" está lejos de ser así. Como todos los demás deseos, la sed de licores está en el cuerpo de deseos y es deber del Ego dominarlo por su propio poder de voluntad. Por eso está en la escuela de experiencia que se llama vida, y nadie puede hacer ese crecimiento moral por él, así como nadie puede digerir las comidas por otro. La naturaleza no tiene necesidad de que se le corrija; cada uno debe resolver sus propios problemas y dominar sus propios defectos mediante la propia voluntad. Por lo tanto, si el hipnotizador mejora el cuerpo del deseos de un borracho, el Ego en el borracho tendrá que aprender sus lecciones en una vida futura si muere antes que el hipnotista. Si el hipnotista muere primero, el hombre volverá inevitablemente a tomar de nuevo, pues entonces la parte del cuerpo vital del hipnotista que tuvo el deseo malo refrenado, gravitará de regreso a su curso normal y la acción se anula. El único camino para dominar un vicio permanentemente es su propia voluntad. El hombre que usa su poder mental indignamente es el peor de los humanos; así como el más dañoso criminal de su clase.

El más engañoso de todos los males es aquel hecho sobre el plano mental de acción, donde un hombre bajo la apariencia de perfecta respetabilidad, a menudo bajo el manto de la benevolencia, puede marchitar la vida de otros, plegar sus voluntades a sus propios fines, y no obstante aparecer como irreprochable y hasta ser visto como un amigo y benefactor por su víctima.

Su transgresión es a menudo castigada durante la misma vida en la cual se comete, pero frecuentemente en las vidas posteriores, encuentra su expiación,e n idiotez congénita. El crimen de determinados hipnotistas es, en el hecho, una fase del "Pecado Contra el Espíritu Santo." El mal espiritual del hipnotismo bien puede decirse que es el mayor crimen sobre la tierra y el mayor peligro para la sociedad.


                                                                                                                            María Inés Caparrós



La acción y la palabra tienen un efecto y un lugar

        Que lo aparente sea en esencia Real dependerá si lo que estamos considerando tiene significado.
        El significado puede perderse en un simple simulacro, en una representación sentimental incomprendida. Cuando las cosas son usadas correctamente, es decir, están relacionadas en un sentido de continuidad, nos contactamos con lo verdaderamente Real.
        Todo simbolismo es el reflejo de una Verdad. Puede haber sido modificada, adaptada para otros fines, pero lleva consigo una Verdad, la misma, internalizada en cada una de sus partes.
        Al juzgar, buscamos esas Verdades en direcciones equivocadas, interpretando de manera equivocada también.
        Solo al experimentar la acción, trascendemos la palabra y al sentirnos en ella de un modo diferente, penetra en la conciencia como una Verdad de calidad diferente.
        Toda acción, como toda palabra tiene un efecto y un lugar, esta es la base de la Conciencia Fractal, que no es tal conciencia.
        La Conciencia Fractal se mueve entre el increíble complejo de acciones y sucesos en un estado de conciencia interna de su significado.


Por: María Inés Caparrós 




Los dos bautismos y el Cristianismo Original


No es nuestra intención crear una religión nueva, ni tan siquiera recrear la que consideramos como la original fuente del Cristianismo sino mostrar luz sobre un asunto común a todos los cristianos y que, por diversos motivos, los ha venido dividiendo en diversas comunidades que mantienen doctrinas diferenciadas; pero de un origen divino común.

Religión procede de Religare que significa religar o unir lo que un día fue separado; es decir el Hombre de la Fuente Original y a la que las diferentes creencias denominan como Dios con sus diferentes acepciones o apellidos. "Por sus obras los conoceréis", se dice en los evangelios y si esto es cierto, que no lo dudamos, las diferentes religiones existentes utilizan el término de Religión de forma improcedente, dado que la Historia nos muestra que más bien funcionan como fuente de separación entre los hombres y, entre los hombres y la Fuente Divina.

La verdadera Religión Cristina se encuentra expresada en el Bautismo, un único Bautismo compuesto de dos iniciaciones progresivas; pero bien diferenciadas: El Bautismo del Agua (Afecta al Alma) y el posterior Bautismo por el Fuego (Afecta al Espíritu).

Generalmente se considera, por todas las corrientes eclesiásticas, al Bautismo como un Sacramento con poder en sí mismo y que se concede mediante algún tipo de Ceremonia; pero lo cierto es que no deja de ser otra cosa que una Iniciación simbólica y que tendrá consecuencias, o no, dependiendo de su actitud en la Vida del Cristiano.

En las religiones oficiales, de un modo u otro, el Bautismo viene a significar la aceptación de Jesús como el salvador de los pecados del Hombre; es decir que el recipiendario acepta por fe la figura de Jesús como su redentor. Esto evidentemente no sucede en el Bautismo de los infantes y en donde son los padres de la criatura bautizada los verdaderos intercesores y responsables del Sacramento. En el Infante el Sacramento le viene impuesto y como tal es investido con su supuesto Poder. Evidentemente los padres se comprometen a que la Criatura crezca y se mueva por el Camino de la Fe. En los cristianismos de la Reforma Protestante, consideramos que con mejor criterio, el Sacramento del Bautismo no se concede hasta que el recipiendario tiene el suficiente uso de razón como para abrazar, por sí mismo, la Fe que se le ofrece.

Dicho lo cual, vemos como un Proceso iniciático que solo corresponde al Recipiendario y a su actitud ante la Fe o Gnosis, fue transformado, con el tiempo, en un Sacramento con Poder en sí mismo capaz de cambiar, supuestamente, a la Persona por el mero hecho de recibirlo.

El simbolismo del Bautismo por agua representa la limpieza del cuerpo y por ende del Alma, de Ánima, animal. Limpieza necesaria para que el Recipiendario pueda recibir en su Ser, simbólicamente en su Corazón, la Fe o Gnosis. En las religiones oficiales generalmente se acepta que lo que se recibe y se asienta en el Trono del Corazón es la Figura de Cristo-Jesús, como algo ajeno al individuo; es decir empieza, a partir de dicho instante, a formar parte de él la figura del Cristo Redentor.

En realidad se trata de un error impuesto, en el transcurso de la historia de las religiones cristianas, por supersticiones ajenas al Cristianismo Original, dado que de lo que se trata es de, con el simbolismo de la inmersión en el agua, eliminar del Cuerpo físico y por lo tanto del Alma animal, todas aquellas impurezas de las diferentes personalidades que impiden que la Gnosis, la Fe o Verdad Divina, de origen Celestial, pueda penetrar hasta el Trono simbólico del Corazón donde se asienta, desde el mismo nacimiento, el "Cristo durmiente" o Chispa de espíritu divino que todo ser humano llevamos con nosotros y que es nuestro verdadero Ser. Solo tras la Iniciación efectiva del Bautismo del Agua, la Chispa de Espíritu puede ser tocada por la corriente vibratoria de la Gnosis y despertar a la Verdad. Verdad que supone el reconocimiento de que no solo somos animales sintientes sino criaturas espirituales; en definitiva, hijos de Dios.

El verdadero Bautismo iniciático supone el reconocimiento de un Estado que antes nos era desconocido y supone una iniciación efectiva que durará un determinado periodo de tiempo y que tan solo dependerá de la limpieza que realicemos en nuestro vehículo físico-anímico y por lo tanto de la capacidad de recibir la suficiente gnosis, energía divina, como para alimentar al bebé recién nacido y que los rosacruces vienen a denominar como el "Capullo de la Rosa del Corazón".

Tal y como dijo Pablo en sus epístolas, este recién nacido debe de ser alimentado de leche, dado que la carne aún no puede ser digerida. Es decir, que lo mismo que el nacimiento del Alma, la Rosa, no se produce, ipso facto, por el hecho de recibir un determinado sacramento, así el crecimiento y florecimiento de la Rosa, el Alma Crística, también es un proceso que puede ser más o menos lento. Esa leche a la que se refería Pablo no es otra cosa que el Amor y la bondad, en todas sus manifestaciones, que supone un cambio progresivo en la Vida del Iniciado. Donde antes el Individuo actuaba de forma egoísta, ahora lo hace de forma altruista y desinteresada. Ese darse a los demás no es otra cosa que la leche simbólica a la que se refería el Apóstol Pablo.



Transcurrido un determinado tiempo, variable para todos los individuos humanos, el Iniciado se encuentra preparado para la segunda parte de la Iniciación, el Bautismo por el Fuego del Espíritu Santo y donde ese alimento simbólico de carne supone el aceptar la responsabilidad total de lo que supuso la aceptación de la Fe, Gnosis Celestial. El Primer Bautismo fue un acto de aceptación primero y de preparación emocional después; pero ahora la exigencia es infinitamente mayor dado que se debe de procurar un camino de accenso al Cristo, a la Rosa del corazón ya formada, del músculo cardíaco, donde hasta ahora se encontraba su asentamiento, hacia el Trono de la Cabeza o de la Razón.

Esta Iniciación se concede, de forma simbólica, mediante la imposición de Manos de un Sacerdote Iniciado en los misterios de Melquisedec. Hasta ese instante, el Iniciado, había seguido el Sacerdocio de Aarón y había trabajado sobre sus propias emociones; pero a partir de este instante sagrado ha llegado el momento de que la Personalidad, como un conjunto unido, no disgregado, ofrezca en supremo sacrificio el Bastón de Mando al Cristo que moraba dormido, despertó y creció en su Corazón.
Es a partir de este segundo Bautismo renovador por el fuego que el Hombre Antiguo se ha transformado en el Hombre Nuevo, el Hijo de Dios consciente y que sus actos ya no serán producto de su Alma emocional sino de su Ser Espiritual y Eterno. Es solo entonces cuando la Iniciación es completa y que podemos hablar del Poder del Sacramento. Porque el Sacramento del Proceso de los dos bautismos no es algo que nos pudiera ser impuesto desde el exterior sino que es algo que crece, dado que ya existía con anterioridad, y toma Vida plena en nuestro Interior. 
El Trabajo de este Superior Iniciado será la consecución del Cuerpo Alma de Espíritu, la Rosa Dorada o Fénix Celeste, para retornar, junto a todos sus hermanos, al Plano Original de donde proceden.




 La tercera y última Iniciación en este Plano de existencia


Una vez superadas las iniciaciones de los bautismos por el agua de la purificación y del fuego de la renovación, al Iniciado en las lides de la vida le queda por pasar la suprema Iniciación de la Muerte del cuerpo físico; pero al contrario que las dos anteriores, en las que es la propia Personalidad evolucionada la que sale a su encuentro, en esta ocasión es el Iniciado “Hombre Nuevo”, cual ermitaño el que se encuentra a la espera de su Suprema Iniciadora.

En realidad toda nuestra Vida es un Camino Iniciático completo y donde el vivir es una permanente preparación para este último encuentro en el Plano Físico. El nacimiento supone la entrada del Recipiendario al Templo Iniciático, cargado de Luz, que es el Mundo tras haber pasado nueve meses en el Cuarto de Reflexión del útero materno. La toma de consciencia plena de nuestro cometido en la Vida de servicio a los demás, que a cada cual le llega en diferente momento, supone esa elevación que es la Iniciación por el Fuego del Espíritu, dado que se trata de eso, de la toma de poder pleno del Ser Eterno, de Yo Soy, de todos sus vehículos de manifestación. Donde antes solo había Personalidad, ahora mora la divinidad.

El Ser Humano pasa por la vida superando las pruebas impuestas por los Misterios menores o de Isis, de la Materia, del Mundo que nos toca vivir, de la Tierra. En caso de que se intente huir de cualquiera de dichos exámenes, nos volverán a salir al paso de nuestra existencia una y otra y otra vez, hasta que les hagamos frente. Nuestra responsabilidad, como iniciados, es no ir a su forzado encuentro sino hacerles frente cuando nos alcancen.

Algunos intentan y dicen encontrarse inmersos en la Iniciación de los Misterios Mayores o de Osiris, del Sol, del reflejo físico del Eón creador del Sistema Solar; pero lamentablemente se encuentran en un terrible error que les ciega sus ojos, dado que los Misterios de Osiris, los verdaderos no inventados por el Ser Humano, solo se conceden tras haber traspasado el velo de la Muerte.

A pesar de que la Vida es la suprema Escuela Iniciática, a la generalidad de la humanidad, desde que nacemos nos inculca, el Sistema, que esta Vida está para miles de cosas, entre ellas su gozo y disfrute, e incluso el aprendizaje de conocimientos que en mucha ocasiones no dejan de ser otra cosa que una pesada rémora para que, en su momento, el Espíritu de Yo Soy, pueda elevar su majestuoso y celestial vuelo hacia su verdadera morada celestial. Al Hombre no se le enseña que ha venido a este Mundo a Morir y es, exactamente esto, la esencia y fin último de la Existencia.

La Muerte supone para la Consciencia de nuestro Ser Eterno, un renacer similar al que se produce cuando la bella mariposa surge del capullo que construyese la original e informe oruga. En realidad, la Mariposa siempre estuvo presente en el gusano como el árbol se encuentra implícito en la semilla.

Hay algo muy importante que todo Iniciado del Campo de Batalla de la Vida debe de tener en cuenta: Nunca, jamás se debe ir al encuentro de la tercera y suprema Iniciación. El Candidato, cada uno de nosotros, debe mantenerse en un estado de paciente espera porque del mismo modo que las anteriores iniciaciones no son efectivas si no nos encontramos preparados, el simple hecho de dejar la vida física no supone que hayamos sido iniciados. Debe quedar meridianamente claro que la Muerte solo es una Iniciación cuando el Iniciado está perfectamente preparado, pues en caso contrario lo único que sucede es que es reenganchado a la noria del Samsara y estará condenado a repetir, en una nueva existencia física, aquellas pruebas, lecciones y exámenes que el individuo no hubiese superado por haber huido, en vida, de ellos.

Recuerden: El suicidio jamás fue o será una opción válida.

La mayoría de las religiones establecidas en nuestro Plano de Existencia tienen instituidos algún tipo de Sacramento para el momento crucial en el que el Alma, con toda su carga espiritual, o el Espíritu con toda su alma recuperada. La extremaunción o santos óleos, en el caso de la Iglesia Católica, y el consolamentum en el caso de la antigua Iglesia Valdense, mal denominada Cátara.

Del mismo modo que los dos bautismos ya conocidos, hago hincapié en que más que sacramentos externos se trata de símbolos externos para recordarnos a nosotros y al pronto difunto que ha llegado la hora de la tercera y última Iniciación. Es un sacramento mágico, si se quiere, en el sentido de ayudarnos a recordar lo que somos, del porqué estamos aquí y hacia donde nos dirigimos.

Que somos una entidad divina, que estamos aquí con el fin de adquirir experiencia preparatoria para enfrentarnos a la Iniciación suprema y que nos dirigimos, de regreso, hacia nuestro Hogar Celeste. Existe un Sacramento, nunca lo negamos; pero se trata de un Sacramento interno, interior y que solo puede ser efectivo si el Iniciado se encuentra preparado, lo acepta de buena voluntad y ha llegado la hora previamente programada.

Cuando el Hombre o la mujer se han preparado de forma adecuada para el último paso iniciático que es la Muerte, esta acudirá en lugar y hora y tomará, con cariño, la mano del Iniciado para conducirlo al interior de su Eón Celeste. Un dulce y amable caballero para las señoras y una luminosa dama para ellos.

Recuerden: No tengan miedo, cuando llegue la hora. Acéptenlo con naturalidad y sin miedo porque con la Muerte no se acaba nada, se da un salto evolutivo espectacular que nos conducirá a otros mundos, otras aventuras con las que lidiar.

Prepárense, sin pausa, para la llegada de ese majestuoso día.




Diseño y construcción de los diversos mundos

De modo semejante a como una persona es capaz de diseñar su propia casa y dividirla en diferentes partes para ubicarla y luego determinar su construcción, ubicación apropiada en el espacio cósmico, llena ese espacio con su aura, compenetra cada átomo de  la siempre existente Raíz Cósmica con su vida, y son despertadas las actividades latentes en cada átomo indivisible.
Cuando decimos "siempre existente Raíz Cósmica construcción del Espíritu Universal (el Absoluto), a la vez que, cuando hacemos referencia a un Gran Ser Creador, al que llamamos Dios (Ser Supremo) y de quien en cuanto espíritus formamos parte, no estamos aludiendo sino a la expresión del polo positivo del mismo Espíritu Universal, es decir, también alAbsoluto.

Por tanto, todo cuanto somos capaces de descubrir como tierra, océanos o formas minerales, vegetales o animales, absolutamente todo aquello que podamos percibir, en realidad se trata de espacio o espíritu cristalizado, emanado de aquella "siempre existente Raíz Cósmica, de aquel Espíritu Universal a través de su polo negativo, única cosa existente en el alborear del Nuevo Día de Manifestación.

Resumiendo, podemos decir que de la actuación del polo positivo sobre el negativo del Absoluto, viene a ser en su manifestación el Universo, y que las distintas formas densas observadas, en sí cristalizaciones, son concreciones en torno al polo negativo del Único Espíritu.

Pues bien, una vez que Dios ha concebido y diseñado debidamente el Mundo que desea crear – en este caso nos estamos ocupando ya de nuestro Sistema Solar – lo dota, pues, de orden, y si todo el sistema lo interpenetra con su conciencia y vida, lo cierto es que cada "habitación" o espacio diferenciado queda sometido a una vibración o conciencia diferente, específica, motivo por el que cada mundo, cada región o subdivisión se encuentra constituido de diferente manera a cualquier otro. 

Sin embargo, en ningún caso puede pensarse que los mundos se encuentren superpuestos, unos encima de otros, o separados mediante espacio y por tanto con distancia entre ellos, muy al contrario. Aunque ellos son distintos estados de materia, con distinta vibración y densidad, se interpenetran, es decir, los más sutiles interpenetran a los más densos, sobresaliendo un trecho de espacio en derredor de éstos. Tampoco los mundos son creados desde el principio ni tienen por qué durar hasta el final. Bajo el diseño previamente concebido, Dios los va creando de acuerdo con las condiciones que van exigiendo las necesidades evolutivas de su plan; y si la función de algo concluyera, la forma respectiva pronto degeneraría y acabaría por desaparecer. La economía en los procesos de la Naturaleza hace gala de proverbial sabiduría.

Los mundos inmediatos a su propio Ser son los primeros construidos, y dado que la involución consiste en infundir la vida en la materia de constitución densa creciente para la concreción de las formas - las cuales, todas, son construidas por la vida – de forma gradual los Mundos más sutiles son los primeros que se condensan, diferenciándose a su vez otros nuevos que sirvan de eslabones entre aquéllos ya consolidados y el mismo Dios. A través de la inmersión involutiva se llega a un punto de máxima densidad: el nadir de la materialidad. Mediante la evolución, por el contrario, los Mundos inferiores o más bajos, y sucesivamente, van quedando despoblados de vida, por lo que desaparecerán las formas que les dieron base para ser. De esta observación, acerca de la creación de mundos y su consiguiente y paulatina desaparición, podrá fácilmente deducirse que "los últimos serán los primeros y los primeros los últimos" y ello sin equivocación posible.